El jabón de lavanda y avena ofrece multitud de beneficios a nuestra piel. La lavanda hidrata nuestra piel, elimina impurezas, protege ante agentes bactericidas y nos proporciona propiedades relajantes. A su vez la avena limpia la piel grasa, elimina células muertas, suaviza y restablece su humedad natural, es muy hidratante y nutritiva. Es muy apropiada para pieles sensibles y delicadas ( la harina de avena es un excelente exfoliante natural.)
- 100 gr de aceite de oliva
- 70 gr de aceite de almendras
- 70 gr de aceite de coco
- 70 gr de aceite de girasol
- 125.25 gr de infusión de avena
- 50.10 gr de sosa caústica
- 5 gotas de esencia de lavanda
- Flores de lavanda para decorar ( opcional )
ELABORACIÓN:
- Pesamos los aceites uno a uno, mezclamos y calentamos en una olla.
- Pesamos el agua y la sosa por separado. Mezclamos y removemos lentamente hasta que el líquido esté transparente. NO RESPIRAR LOS VAPORES.
- Vertemos la mezcla de agua y sosa en los aceites. Removemos (ambos recipientes deben tener una temperatura aproximada, con el tacto en el recipiente es suficiente)
- Retiramos del fuego y batimos con ayuda de una batidora. Cuándo esté espeso o deje un hilo por encima de la masa estará listo.
- Vertemos en un molde.
- A los 2 días sacar y cortar (en caso de ser en barra)
- Dejar secar al menos 4 semanas antes de su utilización.
CONSEJOS:
A la hora de hacer jabón artesanal debemos tener unas precauciones mínimas, usar utensilios destinados únicamente a éste fin, hacerlo en un lugar bien ventilado y poner guantes y gafas a la hora de manipular la sosa.
Elena♥